Convivencia Vocacional con Jóvenes de 3º y 4º de Secundaria

El día sábado 5 de julio de 2008, a las 9:30 a.m. se llevó a cabo una convivencia vocacional en el Centro Pastoral de San Ramón. Con la participación de: 11 jóvenes de la Parroquia de San Antonio de Lomerío, 4 de San Martín, 1 de San Ramón, 1 de Concepción, 1 de La Asunta, todos los seminaristas, los dos diáconos, la Hna. Isabel Otero, el P. Luís Vásquez, el P. Ruperto Rodríguez, el P. René Sandoval y Mons. Antonio Bonifacio.

Después de las palabras de bienvenida del P. René Sandoval, se hizo una pequeña oración, que estuvo dirigida por el seminarista Guillermo Supayabe. En la oración se leyó el texto Bíblico de la vocación de Jeremías (Jr 1,4-10) en la que se invitaba a los jóvenes a sentirse llamados por el Señor.

Los jóvenes trabajaron en grupos respondiendo a las siguientes preguntas: ¿Quién es Jesús para mí, a qué me invita?, ¿cómo respondo a las llamadas que me hace mi colegio, mi parroquia y mis amigos?, ¿en el futuro qué me gustaría ser?, y, como signo, representar lo sobresaliente de la vida de Jesús.

A estas preguntas ellos respondieron:

· Que Jesús es un Profeta, el Salvador de la vida, el mejor Amigo, Maestro, Pastor y nuestro Hermano. Nos invita a compartir con las personas, a dar testimonio de sus palabras, a ser sus discípulos y misioneros.
· En el futuro algunos quieren ser: carpinteros, arquitectos, maestros, animadores de la Palabra y sacerdotes.
Entre los signos que presentaron estuvieron: el saludo; simbolizando la cercanía de Jesús con nosotros, el pan; significa la unidad y comunión entre los bautizados, y, tres velas encendidas (pequeña, mediana y grande); indicando el proceso del crecimiento espiritual o el desgaste espiritual de cada cristiano.

Se vio el video de Aparecida preparado por la Conferencia Episcopal, el cual presenta un breve resumen de este gran acontecimiento junto a los pies de Nuestra Señora de Aparecida. También se vio el video de Tony Melendez; estos dos videos despertaron en los jóvenes el interés de acercarse más a Jesús y a su Iglesia, para optar por compromisos concretos.

Las palabras alentadoras de la Hermana, los sacerdotes y del Obispo; hicieron que los jóvenes se sientan entusiasmados en seguir las huellas del Maestro y también sentían que era un don el poder estar presente en este encuentro. Algunas de estas palabras fueron: «Estamos llamados a ser portadores de vida siendo discípulos y misioneros», «Ser diocesano es ser Buen Pastor», «La conversión es volver a Jesús», y «es bueno enamorarse de Cristo».

Los seminaristas presentamos la vida del seminario y las etapas de formación incentivando a los jóvenes, que vale la pena seguir a Cristo desde este estilo de vida.

Finalmente la convivencia terminó a las 3:00 p.m. con la celebración de la Eucaristía presidida por el obispo de nuestro Vicariato.

Seminarista: Adalid Ordóñez