NOTAS DEL VIAJE A COREA

Lunes, 9 de mayo
Mons., Braulio Sáenz, Obispo Auxiliar de Santa Cruz, P. Joseph Ma (sacerdote coreano que iba de vacaciones y nos acompaña como intérprete) y yo, partimos el día lunes 9 de mayo a hrs. 11.30 de Santa Cruz a San Pablo, Brasil. Como no hubo la conexión tuvimos que alojarnos en el Hotel Mónaco donde pasamos la noche. Después del desayuno salgo a pasear al cercano parque. Encuentro mucha gente caminando, trotando, haciendo ejercicios… Pienso en otras personas que salen temprano al trabajo y corren todo el día para ganar el sustento para su familia; ellos no tienen problemas con la indigestión ni con el colesterol... y nace en mi espontáneamente la oración: Señor, tal como hacemos los ejercicios físicos, que no olvidemos de los ejercicios espirituales.

Martes, 10 de mayo.
Partimos a Los Ángeles a hrs. 13.25. El vuelo transcurre tranquilo. En las pantallas de los asientos se señala el lugar donde sobre volamos. Cuando pasamos por encima del territorio mexicano aparecen las ciudades de Veracruz, Puebla, México DF, Guadalajara…Encomiendo este viaje y la misión a la Virgen de Guadalupe. Mis pensamientos recuerdan también a tantos hermanos y hermanas de estos pueblos que he conocido personalmente, y que trabajan en nuestro Vicariato, en Concepción.

Miércoles, 11 de mayo.
El vuelo de San Pablo a Los Ángeles ha durado pues exactamente doce horas. Antes de aterrizar en Los Ángeles leo en la pantalla los nombres de los pueblos: Santa Bárbara, San Diego, San Francisco, Santa Ana... Todos ellos son las misiones fundadas por el gran misionero franciscano, Fr. Junípero Serra (+ 28.08.1784). ¿Qué testimonio dejaremos nosotros después de la evangelización en el siglo presente? Después de una hora de descanso en Los Ángeles continuamos el viaje. Bordeamos la costa del norte del continente americano, como también de Alaska. Luego nos acercamos a la península de Sajalín. Recuerdo que a los inicios del siglo XX en este lugar trabajaba en la obra de evangelización un sacerdote franciscano de mi tierra natal; lo encomiendo al Señor en la oración personal. Cuando pasó la medianoche el día jueves, sacamos el breviario y rezamos Laudes con el Mons. Braulio. ¡Que diferente suenan las palabras del salmista en estas circunstancias, viendo las islas como la palma de su mano!: ¿Quién ha medido a puñados el mar o mensurado a palmos el cielo, o a cuartillos el polvo de la tierra?

Al cruzar por encima del norte de Japón no puedo olvidar a tantas personas, víctimas del maremoto y del famoso tsunami en el mes de febrero de este año. En la pantalla del monitor apareció al frente de la isla el continente asiático y en los límites con Rusia y China, la ciudad de Vladivostok. Me acordé de mi papá, cuando al finalizar la II Guerra Mundial (1945) estuvo algún tiempo en esta región en el campo para los prisioneros. La providencia de Dios quiso que por su grave enfermedad fuera liberado de este lugar y enviado al hospital, donde poco a poco retornó otra vez a Europa.

Jueves, 12 de mayo.
Llegamos gracias a Dios a horas 16.20. Desde Santa Cruz, San Pablo, Los Ángeles y San Francisco recorrimos casi 25.000 km
Otro recuerdo: Cuando mi mamá se alistaba para viajar al mercado a la cercana ciudad de Opole, distante a unos 25 km. de mi pueblo, entonces me llevaba consigo, lo que siempre me ha causado mucha alegría. ¡Que aventura distanciarse del pueblo natal a unos 25 km! Tenían que pasar muchos años para alejarse a unos 13 000 km (Polonia– Bolivia) y ahora 25 000 km: Bolivia– Corea del Sur!
El vuelo de Los Ángeles a Seúl (Inchon) duró diez horas. En el aeropuerto nos esperan los sacerdotes coreanos que trabajaron en Santa Cruz: PP: Juan Sah, Juanito Park, Esteban Kim; también la M. Gral de las Siervas del Sagrado Corazón, Hna. María Gracia Kim, con la Hna. Josefina Kim, maestra de las novicias, antigua misionera en Santa Cruz. Los padres nos llevan a la casa de retiros de las Hermanas Benedictinas de Tutzing.

Antes de mediodía visitamos al Sr. Arzobispo Tadeo Cho Whan Gil. Algunos datos sobre esta iglesia local: en Corea existe 3 arquidiócesis, 12 diócesis, y una diócesis castrense.
La arquidiócesis Dae-Gu, fue elevada como arquidiócesis en el año 1962, el arzobispo fue nombrado como X Obispo Titular el día 8 de diciembre del año 2010. La arquidiócesis cuenta con 400 000 católicos y casi 450 sacerdotes diocesanos en 158 parroquias y unas 30 capillas. La patrona es la Virgen de Lourdes junto con el Santo Mártir Juan Lee como 2º Patrono.

En un clima muy agradable hablamos de nuestros trabajos pastorales tanto en Santa Cruz como en Concepción. Viendo las grandes necesidades el Sr. Arzobispo promete mandar al Vicariato al P. José Suk que cumple los cinco años de trabajo en Santa Cruz ; junto con él iría al año un sacerdote.


La patrona de Corea del Sur es la Inmaculada Concepción de María y de la Arquidiócesis de Dae– Gu la Virgen de Lourdes... ¿Incidencia, o signo visible de la preocupación de la Inmaculada Virgen María por los nuevos trabajadores en la Viña de su Hijo Jesucristo en nuestro Vicariato dedicado a su nombre? Luego pasamos a visitar la gruta de N.S. de Lourdes; gente alrededor del pequeño patio, sentados en los bancos, rezando el rosario...
Visita a las Hermanas de San Pablo de Chartres. En todo el mundo son más que 4 000 hermanas. Finalmente los padres nos llevan a un exquisito almuerzo al centro de la ciudad; como de costumbre todos se quitan los zapatos al entrar a la casa y… nos sentamos en el suelo, para servirnos las porciones de los frutos del mar (pescado).

Viernes, 13 de mayo.

En la mañana visitamos un templo de Budista en las cercanías de Daego. En el templo bastante gente arrodillada en el piso de madera entonando los melancólicos cantos presididos por un gurú budista. Necesitan muchas inclinaciones para purificarse y conseguir la gracia de Buda. Si son constantes en su oración y las prácticas religiosas, pueden llegar a ser Buda.
En nuestra religión; si llegamos a ser dóciles al Espíritu del Señor que continuamente intercede por nosotros, llegamos a ser hijos adoptivos de Dios. Pues la diferencia esencial entre budismo y el cristianismo es que por la fe sabemos que es Dios quien nos amó primero, y es Él que sale en búsqueda de nosotros por medio de su Hijo Jesucristo.

Luego visitamos al santuario de los Mártires Coreanos. En este lugar quisiera recordarles algunos datos históricos sobre los inicios de la Iglesia en Corea. (Final de la I parte de la crónica)

Mons. Antonio B. REimann