El encuentro inició con la celebración de la Eucaristía a horas 9:00 a.m., con la presencia de nuestro Pastor Mons. Antonio Bonifacio Reimann Ofm, y la participación de los sacerdotes: Pbro. René Sandoval, Pbro. Ruperto Rodríguez, Pbro. Carlos Urzagaste, los seminaristas de nuestro Vicariato, con dos nuevos aspirantes al propedéutico: Maikol Ortiz y Agustín Chuvirú y también contamos con la presencia de algunos padres de familia.
Al inicio de la Eucaristía el Mons. Antonio nos invitó a dar gracias por el don de la vocación sacerdotal, concretizado en los dos nuevos sacerdotes del Vicariato, Pbro. Carlos Urzagaste y Pbro. Víctor Hugo Velásquez. También invocó la ayuda del Espíritu Santo en las decisiones que el pueblo debe tomar el próximo 25 de Enero.
La Eucaristía fue presidida por el nuevo sacerdote Pbro. Carlos Urzagaste Ortega., quien nos exhorto en su homilía, a: “escuchar la voz del Señor, y a no escuchar otras voces que nos apartan del amor de Dios, también nos invitó a ser humildes y sencillos de corazón como los apóstoles, y que nos dejemos conducir por Él”.
Después de compartir la mesa de la Palabra y la Eucaristía nos trasladamos al Centro Pastoral, donde el Obispo nos muestra el video del resumen del tercer congreso misionero Latinoamericano realizado en Quito; en el cual resaltó como la Iglesia va respondiendo al llamado de Jesús de ser discípulos y misioneros.
En su reflexión Mons. Antonio nos dijo: Jesús fue enviado por el Padre, para ser el puente entre su pueblo y Dios, Él es Él por excelencia. A imagen de Jesús, también el Obispo y los sacerdotes son el puente de unión entre Dios y su pueblo.
Por eso Jesús es el centro de nuestro caminar y el centro de nuestro corazón, todos somos misioneros y debemos identificarnos con Cristo.
Casi al terminar todos los seminaristas presentes, realizaron la entrevista personal, para ver el caminar en su formación hacia el sacerdocio.
El seminarista Samuel Jaén, dio las gracias por el acompañamiento del P. René Sandoval, en estos últimos tres años, como responsable de los seminaristas. También expreso la unión que existe en este grupo de los seminaristas del Vicariato e invitó a seguir juntos en este caminar hacia el sacerdocio ministerial.
Al final compartimos un rico almuerzo preparado para esta ocasión y Mons. Antonio nos hizo la entrega de los presentes a todos por las fiestas de navidad y el comienzo del nuevo año.
Nos despedimos con un fraternal abrazo.
Seminaristas:
Anacleto Parapaino
Roberto Ayala
Al inicio de la Eucaristía el Mons. Antonio nos invitó a dar gracias por el don de la vocación sacerdotal, concretizado en los dos nuevos sacerdotes del Vicariato, Pbro. Carlos Urzagaste y Pbro. Víctor Hugo Velásquez. También invocó la ayuda del Espíritu Santo en las decisiones que el pueblo debe tomar el próximo 25 de Enero.
La Eucaristía fue presidida por el nuevo sacerdote Pbro. Carlos Urzagaste Ortega., quien nos exhorto en su homilía, a: “escuchar la voz del Señor, y a no escuchar otras voces que nos apartan del amor de Dios, también nos invitó a ser humildes y sencillos de corazón como los apóstoles, y que nos dejemos conducir por Él”.
Después de compartir la mesa de la Palabra y la Eucaristía nos trasladamos al Centro Pastoral, donde el Obispo nos muestra el video del resumen del tercer congreso misionero Latinoamericano realizado en Quito; en el cual resaltó como la Iglesia va respondiendo al llamado de Jesús de ser discípulos y misioneros.
En su reflexión Mons. Antonio nos dijo: Jesús fue enviado por el Padre, para ser el puente entre su pueblo y Dios, Él es Él por excelencia. A imagen de Jesús, también el Obispo y los sacerdotes son el puente de unión entre Dios y su pueblo.
Por eso Jesús es el centro de nuestro caminar y el centro de nuestro corazón, todos somos misioneros y debemos identificarnos con Cristo.
Casi al terminar todos los seminaristas presentes, realizaron la entrevista personal, para ver el caminar en su formación hacia el sacerdocio.
El seminarista Samuel Jaén, dio las gracias por el acompañamiento del P. René Sandoval, en estos últimos tres años, como responsable de los seminaristas. También expreso la unión que existe en este grupo de los seminaristas del Vicariato e invitó a seguir juntos en este caminar hacia el sacerdocio ministerial.
Al final compartimos un rico almuerzo preparado para esta ocasión y Mons. Antonio nos hizo la entrega de los presentes a todos por las fiestas de navidad y el comienzo del nuevo año.
Nos despedimos con un fraternal abrazo.
Seminaristas:
Anacleto Parapaino
Roberto Ayala