¨ Mateo: “bienaventurados los pobres de espíritu”, es la apertura de Dios para con los Humildes abierto a los cambios.
¨ Lucas: “bienaventurados los vosotros los pobres” “!y hay de ustedes los ricos”, (Lc.6,24).
¨ Mateo los pobres de espíritu indicaría más una actitud interior que un estado social Jesús no ha tratado de beatificar una clase social. Sólo un situación espiritual que puede ser puesta en relación con una calidad espiritual como es el Reino. Es muy verdad que la pobreza real es una vía privilegiada hacia la pobreza de espíritu y Jesús lo repite de mil modos. El verdadero hombre evangélico es el cliente de Dios que ha apostado todo por Dios, en la fe.
¨ San Pablo “Jesucristo, siendo rico, por vosotros se hizo pobre a fin de que los enriquecierais con su pobreza”. No hay duda de que aquí se habla de la pobreza material de Cristo. El sentido es: Cristo siendo rico, se hizo pobre materialmente para enriquecernos espiritualmente “Asumió la pobreza material, comenta Santo Tomás para darnos riquezas espirituales”. No vino, de hecho, a hacer a los hombres más ricos en bienes terrenos, sino a hacerlos hijos de Dios y herederos de la vida eterna. “Las zorras tienen guaridas, y las aves del cielo nidos; pero el Hijo del hombre no tienen donde reclinar la cabeza”. Lc. 9, 58.
¨ Ser pobre “para los pobres” y ser “pobres”; con la venida de Cristo se registra un salto de cualidad en materia de pobreza. Se puede caracterizar así: En el Antiguo Testamento presenta un Dios “para los pobres”; el Nuevo Testamento un Dios que se hace, él mismo “pobre”, que “tiene piedad del débil y del pobre”, que “define la causa de los miserables”, que “hace justicia a los oprimidos” . Jesús nos enseña hacer la caridad con benevolencia; para tomar en cuenta las bienaventuranzas en la actualidad debemos estar con los pobres y ser pobres.
“Como Cristo efectuó la redención en la pobreza y en la persecución, así la Iglesia es la llamada a seguir ese mismo camino… Cristo fue enviado por el Padre a evangelizar a los pobres y levantar a los oprimidos, para buscar y salvar lo que estaba perdido; de manera semejante la Iglesia abraza a todos los afligidos por la debilidad humana, más aún, reconoce en los pobres en los que sufren la imagen de su Fundador pobre y paciente, se esfuerza en aliviar sus necesidades y pretende en ellos a Cristo”.
Dra. Elsi Morales
NOTA: En los próximos meses se publicaran los puntos restantes de este artículo.