“Salvar Almas para Dios”
Desde el 8 al 13 de Diciembre de 2012 tuve la oportunidad de participar a la primera capacitación del “PROYECTO RAQUEL” a nivel nacional de Bolivia, que se llevó a cabo en la Arquidiócesis de Santa Cruz, dirigido por la Licenciada Nancy Tosi responsable Laica del dicho proyecto en su Arquidiócesis de Cuenca- Ecuador.
Empezaba con la frase de “Salvar almas”, por el mismo hecho de que en nuestro mundo de hoy hay muchas almas perdidas, enterradas, escondidos, heridos, etc. Sintiéndose incapaces de reconocer la misericordia de Dios y alejándose de la presencia resucitada del Señor, tratando de llenarse con situaciones cotidianas que presentan la sociedad y el mundo, pero frente a todo esto se quiere dar una orientación verdadera y a empezar dar sentido a la vida con este proyecto. Esta capacitación fue un poco para conocer el proyecto que ya se fundó hace mucho tiempo en Estados Unidos y se ha ido esparciendo en otros países europeos y llegando a América Latina en Ecuador y ahora se está intentando en Bolivia, de dar esta ayuda de “Seudo Sanación del Síndrome Post-aborto” a todos /as que lo vivieron y lo viven o intentan vivirlo.
Se habló mucho del valor de la vida, la dignidad de cada persona humana y las consecuencias que se vive en las familias tocadas por el aborto. También se vio el como iniciar este proyecto, con quiénes trabajar y dónde instalar la oficina central. Pero todo esto es gracias a la oración de muchas personas que se preocupan por la VIDA: como Monseñor Braulio que abrió la puerta para esta capacitación, junto con los Hermanos Misioneros de la Sagrada Familia, sacerdotes Diocesanos, Religiosas y algunas Familias de distintas parroquias. El proyecto es muy bueno y ayudará mucho a tomar conciencia y dar sentido a la vida desde la reconciliación con Dios. “Por que la vida vale la pena vivir; porque se encuentra razones, motivos por cuales vivir y esto es lo que le da sentido a la existencia humana; el sentido de la vida no puede ser dado sino que debe ser hallado por uno mismo”, de este modo podremos tener familias que dan vida a la vida y jóvenes que digan con mucha libertad que su vida es para servir al Señor en bien del prójimo; aumentando cada día la FE y levantándoles su mirada a la misericordia de Dios.
Agradezco a Monseñor Antonio por haberme invitado a esta experiencia del proyecto y nos unimos en oración para que se haga realidad este acompañamiento del Post-aborto. Que María nuestra Madre que llevó en su vientre a Cristo interceda por todas las personas que viven este dolor del aborto.
Hna. María Lucia Cruz - Mjes