Ya todos sabían desde hace una semana. Todos estaban invitados, personalmente o por la radio. Cuando ya llegó el día elegido por nuestro párroco, día domingoComenzaron a llegar los que tenían posibilidades y demás, de nuestras zonas más alejadas fueron trasladados por: Dr Monje como encargado de la Pastoral de enfermos, Hno Marcos y Diác. Carlos.
Para la imposición de manos por el P. Jorge y la unción con Óleo de los enfermos este año se notó gran participación. Se sintió y comprendió que el día del enfermo no solo es para los hombres y mujeres de la tercera edad sino para todo aquel que esta enfermo, se vio a niños, jóvenes, adultos y ancianos.
Después de la Bendición, a todos nuestros queridos enfermos les invitamos a servirse un refrigerio. Durante el refrigerio notaba con gran alegría una verdadera convivencia entre todos los participantes, familiares y amigos. Todos compartían sus pesares y sus esperanzas. Para todos fue una gran alegría ver participar a todos nuestros enfermos en la Santa Eucaristía, en especial en la Catedral, y en el día del enfermo. Todos agradecieron la preocupación por ellos y al mismo tiempo pidieron que se haga otro encuentro.