En el Campamento de los Troncos ya desde muy temprano todos esperaban la llegada del nuestro Cardenal Terrazas. En la localidad de “Los Troncos” existen más de 400 familias refugiadas en campamentos de emergencia. El Carmen, 2 de Agosto, Fortín, El Plato, Berlín son las comunidades que se cobijan en este lugar. Al ver que llegaba se llenaban de alegría y esperanza. Uniéndose a la causa Cardenal Julio Terrazas les dijo: “yo he querido venir a prolongar la alegría de la Pascua”.Luego Mons. Antonio Reimann, dio la bienvenida a Cardenal Terrazas y al mismo tiempo lo invitó a Celebrar la Santa Eucaristía con el clero, las hermanas religiosas, los alumnos y toda la comunidad en su salón. En su homilía, Cardenal Terrazas manifestó que “el mensaje de Pascua es la vida”, enfatizando que hay que seguir luchando y trabajando con esperanza por “la vida de los niños que hay que salvar, la vida de los jóvenes que hay que ayudar, luchar por la vida de todos”. Cardenal recordó que, al igual que los damnificados -
que lo han perdido todo-, también Cristo se quedó sin nada. Y a ejemplo de Cristo todos deben aceptar la voluntad de Dios, “El supo aceptar la voluntad de su Padre, supo decir que se haga su voluntad, y su fidelidad al Padre es lo que cuenta. Ese fue el motivo por el cual el Padre lo resucitó, para que también nosotros entendamos que nuestros problemas y dificultades no son para exterminarnos, son para que se manifieste el Señor que vive en cada uno de nosotros y por ello, haya mas amistad, solidaridad y ganas para trabajar por la vid y el amor al prójimo. “Yo estoy seguro que el Señor los acompaña, que el Señor vive con ustedes, el Señor también sufre con ustedes, pero cada día les está diciendo -no tengan miedo, no se pongan tristes si algunos no vienen a verlos, el Señor está presente-. Tienen ustedes al Señor y a la iglesia a su lado acompañándolos muy de cerca y con mucho cariño”.Les pidió a los presentes que a pesar de sus dificultades no se olviden de Bolivia: “Recen por el País, recen por nuestra nación. En estos momentos muy difíciles necesitamos que la Pascua ablande los corazones y que de fuerzas para buscar soluciones amigables y pacíficas. Luego de la celebración, los damnificados tuvieron la oportunidad de dialogar con Cardenal Terrazas y expresarle sus dificultades. Don Ricardo Aguilera recordó que desde 1992 es la quinta vez que sucede la inundación y este 2008 ha sido el segundo año consecutivo. Y al mismo tiempo pidió ayuda y apoyo para la reubicación. Otro representante de la comunidad de 2 de Agosto expresó: “nosotros somos hombres de trabajo, no queremos que nadie nos maneje. Vivimos de nuestros trabajos. Somos gente trabajadora”. Refiriéndose a los políticos. Otro de los representantes expresó que las autoridades, tanto de la prefectura como el gobierno nacional, no han concretizados sus promesas de ayuda. Para que se escuche su pedido tenían planificado bloqueos. El Padre Estanislao expresó su impresión y la grave preocupación para el futuro al igual que la hermana Blanca la preocupación por las personas que no pudieron salir y están en sus comunidades olvidados sin ninguna clase de alimentación.
“En esta situación, hay la tentación de enojarse con las autoridades e incluso hasta con Dios”, respondió Cardenal Terrazas pidiendo paciencia a los damnificados. “Comprendan que la emergencia es mayor” dijo recordando que hay emergencias en todo el país y que las soluciones no se dan de la noche a la mañana. Al respecto indicó que “hay que ayudarnos entre todos para que los escenarios de vida estén al alcance de todos”. La gran solución para cada uno es la esperanza de vida que da Dios”, concluyó nuestro Cardenal.
Diác. Carlos Urzagaste Ortega