En la segunda semana de enero (10.01), nuestro Vicariato Apostólico ha sido agraciado con el regalo de dos nuevos sacerdotes. Ellos son: Carlos Urzagaste y Víctor Hugo Velásquez. Felicidades hermanos por acoger esta llamada del Señor para hacer presente a Cristo Buen Pastor en medio de su pueblo a través de sus palabras, los signos sacramentales, y toda su vida caracterizada por la caridad pastoral.
Cada don en la vida es al mismo tiempo una tarea. Primeramente ustedes mismos han de cultivar esta amistad con Cristo Buen Pastor, a través de la intimidad con él Señor en la vida cotidiana y el amor al pueblo que el Señor les ha confiado.
También encomiendo a todos los fieles, para que oren por ellos y colabórenles en esta tarea de fortalecer la parroquia como comunidad de fe, de culto y de amor fraterno.
Pbro. Carlos U. ha sido destinado a la parroquia de San Antonio de Lomerío como Vicario Parroquial con el Pbro. Ruperto Rodríguez de párroco. Pbro. Víctor Hugo V. trabajará en la parroquia de San Julián, también como Vicario Parroquial con el Pbro. Pablo Zurowski de párroco.
Cada don en la vida es al mismo tiempo una tarea. Primeramente ustedes mismos han de cultivar esta amistad con Cristo Buen Pastor, a través de la intimidad con él Señor en la vida cotidiana y el amor al pueblo que el Señor les ha confiado.También encomiendo a todos los fieles, para que oren por ellos y colabórenles en esta tarea de fortalecer la parroquia como comunidad de fe, de culto y de amor fraterno.
Pbro. Carlos U. ha sido destinado a la parroquia de San Antonio de Lomerío como Vicario Parroquial con el Pbro. Ruperto Rodríguez de párroco. Pbro. Víctor Hugo V. trabajará en la parroquia de San Julián, también como Vicario Parroquial con el Pbro. Pablo Zurowski de párroco.
Algunos pensamientos de la Conferencia Boliviana de los Religiosos y Religiosas
En los días 14 al 16 de enero participé en la XXVI Asamblea General de la Conferencia Boliviana de los Religiosos y Religiosas.
El tema principal de esta Asamblea fue: LA DIVERSIDAD Y EL DIALOGO. Sabemos que desde el punto de vista de nuestra fe cristiana, la perfecta diversidad y al mismo tiempo la comunión y un permanente diálogo existe entre las tres divinas personas: El Padre, El Hijo y el Espíritu Santo. Nosotros nos hemos sumergido en este misterio de la diversidad y de la comunión en virtud del sacramento del Bautismo.
El Espíritu del Señor es el autor y dispensador de los grandes carismas en la Iglesia como el laicado, el sacerdocio ministerial, y la Vida Consagrada. La diversidad de estos carismas puestos al servicio del Reino de Dios, es la riqueza inagotable de la Iglesia.
La diversidad que existe dentro del pueblo de Bolivia no debe ser obstáculo en la búsqueda de una sociedad basada en la dignidad humana, la libertad, el bien común, el destino universal de los bienes (Cfr. Mensaje de los obispos). En Cambio para que exista un sincero diálogo deben ser respetadas las siguientes condiciones:
- Un acercamiento al otro en un clima positivo, sin miedo, buscando la verdad, superando los prejuicios, dispuestos a perdonar mutuamente.
- Partir del presupuesto, que nadie posee la verdad completa - el “otro”- puede enriquecerme con su aporte.
- Estar dispuesto a cambiar de postura, lo que conlleva la actitud de conversión, dispuestos a reparar los daños causados.
- Como cristianos, no sólo incluyo las dos partes dialogantes, sino vivo la presencia del Señor que me ilumina con su palabra.
En los días 14 al 16 de enero participé en la XXVI Asamblea General de la Conferencia Boliviana de los Religiosos y Religiosas.
El tema principal de esta Asamblea fue: LA DIVERSIDAD Y EL DIALOGO. Sabemos que desde el punto de vista de nuestra fe cristiana, la perfecta diversidad y al mismo tiempo la comunión y un permanente diálogo existe entre las tres divinas personas: El Padre, El Hijo y el Espíritu Santo. Nosotros nos hemos sumergido en este misterio de la diversidad y de la comunión en virtud del sacramento del Bautismo.
El Espíritu del Señor es el autor y dispensador de los grandes carismas en la Iglesia como el laicado, el sacerdocio ministerial, y la Vida Consagrada. La diversidad de estos carismas puestos al servicio del Reino de Dios, es la riqueza inagotable de la Iglesia.
La diversidad que existe dentro del pueblo de Bolivia no debe ser obstáculo en la búsqueda de una sociedad basada en la dignidad humana, la libertad, el bien común, el destino universal de los bienes (Cfr. Mensaje de los obispos). En Cambio para que exista un sincero diálogo deben ser respetadas las siguientes condiciones:
- Un acercamiento al otro en un clima positivo, sin miedo, buscando la verdad, superando los prejuicios, dispuestos a perdonar mutuamente.
- Partir del presupuesto, que nadie posee la verdad completa - el “otro”- puede enriquecerme con su aporte.
- Estar dispuesto a cambiar de postura, lo que conlleva la actitud de conversión, dispuestos a reparar los daños causados.
- Como cristianos, no sólo incluyo las dos partes dialogantes, sino vivo la presencia del Señor que me ilumina con su palabra.
Por intercesión de la Virgen María, Nuestra Señora de la Paz, cuya fiesta celebraremos el día 24 de enero en la parroquia de El Puente, el Señor derrame su luz y su paz todos nosotros.
Fraternalmente Mons. Antonio Bonifacio Reimann, OFM
Fraternalmente Mons. Antonio Bonifacio Reimann, OFM